No
sé cómo tomar este artículo de La Razón publicado hoy. En
principio, el resultado de la encuesta que anuncia me parece una
barbaridad, porque va en contra de los resultados de otras encuestas
similares de una manera demasiado radical. Ni más ni menos que un
70% de apoyo al retroceso de la Ley el Aborto planteado por el actual
Ministro de Justicia. Una encuesta muy oportuna y muy alejada,
sospechosamente alejada, de los valores promedio de consultas
demoscópicas previas realizadas entre la sociedad española, entre
ellas esta misma, realizada hace cinco años por los mismos protagonistas, o esta otra, realizada por El País hace unos días. Si comparamos la de El País con esta, no pueden ser más opuestas.
Me
he puesto en contacto con la empresa a cargo de la encuesta, NCReport, que, con sede en Valencia, es la demoscópica que suele
trabajar para ese periódico. Amablemente, me han remitido la ficha
técnica de la encuesta. En ella se habla de una encuesta telefónica
de 500 entrevistas, y ofrecen una estratificación de las muestras
por edades. La muestra no es la ideal, es un poco pequeña (1000
entrevistas sería un buen punto de partida).
Las
encuestas telefónicas enfrentan no pocos problemas de fiabilidad. Para empezar no
está permitido, porque vulneraría la legislación de protección de
datos, llamar a teléfonos móviles, por lo que estas encuestas sólo
se realizan mediante llamadas a fijos. Ello ya está sesgando los
resultados, pues actualmente cada vez menos personas tienen dos
líneas telefónicas, fija y móvil, renunciándose a la primera a
favor de la segunda. Las líneas fijas quedan en domicilios de
personas de más edad o bien de una cierta extracción social, datos
que deben de conocerse para equilibrar la muestra. No se aclara en la
ficha la hora de las llamadas, un dato fundamental, pues dependiendo
de la hora de la llamada se encuentra en el domicilio a una persona u otra
-generalmente por las mañanas en teléfonos fijos de domicilios es
más probable que responda un ama de casa en una vivienda
tradicional-. Tampoco se aclara si se llama sólo a domicilios o
también a oficinas, si en el caso de los hogares se entrevista a
todas las personas presentes en la casa, etc.
La
encuesta se ha realizado entre mayores de edad con estratificación
por edades y sexos, con un margen de error de un 4.47% y un nivel de
confianza del 95.5%. El muestreo ha sido por selección aleatoria
proporcional entre los municipios mediante tablas de números
aleatorios y cuotas de edad y género, en 68 municipios de 17 CCAA,
entre el 30 de abril y el 3 mayo. Muy poco tiempo.
En
cuanto a edades, parece que se ha mantenido equilibrado el criterio y
las muestras son similares, lo mismo que el sexo, algo que me parece
extraño al ser una encuesta telefónica, en la que las edades están
condicionadas por la hora de llamada y al tipo de teléfono, como indico antes, por lo que para obtener una llamada válida pueden haber tenido que realizarse dos o tres fallidas. También me sorprende la
velocidad del trabajo, en apenas 4 días se ha hecho la encuesta.
Está todo demasiado bien ajustado a los resultados objetivo. Pero
bueno, puede pasar.
Es
al leer la noticia de La Razón, donde empieza a chirriar el asunto.
El titular “Casi el 70% de los españoles
apoya que se protejan más los derechos de los no nacidos” parece
estar cercano a una pregunta plausible en un cuestionario telefónico.
Además, se trata de una pregunta adecuadamente ambigua. Se puede
estar en favor de los derechos de los no nacidos y ser favorable a la legislación actual del aborto. Es en este tipo de preguntas torticeras en el que este tipo
de sondeos “ideologizados” muestra su cocina interna. Porque
finalmente, este posible titular se convierte en: “Casi el 70%, a
favor de reformar la ley del aborto, según una encuesta para La
Razón”. Conociendo que en encuestas similares La Razón llamaba
“mayoría” a un 44% de encuestados en contra de la Reforma de
la Ley del Aborto de 2009, está claro que algo especial se nos oculta en esta
encuesta.
He
intentado obtener el cuestionario al que se ha sometido a los 500
entrevistados, que contiene información fundamental para comprender el grado de manipulación realizado, pero en NC Report no han querido enviarme el
cuestionario ni los cuadros de prespuestas aduciendo que es propiedad
intelectual de La Razón.
No
teniendo acceso a las preguntas que se hicieron a los entrevistados
ni a los resultados, no tengo opción a hacer un comentario mayor
sobre esta encuesta. La Razón puede haber falseado la pregunta para
obtener esos resultados, pero no tengo forma de saberlo. Es más, ni siquiera publican en su noticia la ficha técnica de la encuesta, algo que sí hacían en encuestas anteriores. Es
desconcertante que en los tiempos de la supuesta transparencia no
tengas acceso a algo tan básico como la parrilla de preguntas de una
encuesta realizada al público general, por lo que estás ciego a
interpretarla y usarla con fines científicos.
Sin
embargo, conociendo la trayectoria de NC Report y de La Razón, una publicación que a veces parece la caricatura de un periódico, y que
van de la mano, cabe ponerse en el peor de los
casos.
Una
vez más, flaco favor se hacen a sí mismos quienes encargan, quienes
realizan y quienes cocinan estas mentiras disfrazadas de ciencia.
Desfigurando los datos hasta hacerlos incompatibles con la realidad,
lo único que se consigue es engañarse uno mismo. ¿Es eso lo que se
busca? ¿O la ideología es tan idiota que ciega de manera tan
temenda a los hombres?
Otra
de las preguntas, de creer a La Razón, aparece en esta otra parte de
la noticia: "El 45
por ciento cree que la noma puesta en marcha por Bibiana Aído,
ministra de Igualdad del Gobierno socialista que modificó la ley de
1985,
ha sido efectivamente un coladero en materia de abortos. Con todo, la
opinión pública está algo dividida en este aspecto, pues un 39,7
por ciento opina lo contrario."
Es
sorprendente que el objeto de esta pregunta, que es un dato objetivo (si ha aumentado el número de abortos tras la aprobación de la norma), se pregunte como una
opinión. Esa cifra se puede obtener (está publicado el informe de 2011 al respecto) y de hecho se sabe que los
abortos en España han aumentado con una pendiente similar al promedio de años anteriores, desde la aprobación de la llamada
“Ley Aído”, por lo que lo del “coladero” es una pregunta
ideologizada.
Para colmo, la Ley Aído ha tenido graves problemas de implementación por la transferencia sanitaria a las CCAA, que virtualmente la han aplicado como han querido, obligando a muchas mujeres a trasladarse entre provincias o bien sufriendo el registro obligatorio de sus datos en otras autonomías.
Curiosamente, aquellas respuestas sí se acercan a lo esperable en asuntos que polarizan tando a la sociedad como este, sin la sospechosa unanimidad del titular, aproximándose de nuevo a la encuesta realizada hace cinco años para La Razón.
Hace
tiempo en una tertulia de radio una política respondía a un dato
objetivo de un comentarista con un “bueno, esa es tu opinión”.
Por mucho que el comentarista se desgañitara intentando explicar a
aquella pobre mujer la diferencia entre “dato objetivo” y
“opinión”, ella seguía en su carril, demostrando aquel viejo
adagio de Groucho Marx:
“Es
mejor estar callado y parecer tonto,
que hablar y despejar las dudas
definitivamente.”
De
todas formas, y por si quedara alguna duda, en la propia web de NC
Report se nos aclara para quién trabajan:
La foto que ilustra este post la he encontrado en Wikipedia Commons. "Students working in the Statistics Machine Room of the London School of Economics in 1964". London School of Economics Library and Political Science, y ha sido tomada a su vez de Flickr: The Commons. Está en dominio público.