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La imagen que ilustra este post es la portada de El Pais online de hoy. Está presidida -rodeada más bien- por un enorme banner de una empresa de telecomunicaciones. Si, pobre de ti, pasas -sólo pasas- el cursor encima del banner superior, se inicia esta animación que parece partir en dos el periódico (Posteriormente he descubierto que ni hace falta que pases el cursor; con una filosofía similar a los invasivos "interstitials" la animación se activa con sólo entrar en la página web).
Son demasiadas cosas las que me vienen a la cabeza, desde la banalización de las noticias publicadas, pasando por el deterioro de la -supuesta- primera cabecera informativa española con métodos de publicidad intrusiva y hostil como estos. Pero en general todo me lleva a pensar que vivimos en una sociedad profundamente idiotizada, en la que todo vale con tal de vender.
Las empresas de telecomunicaciones, sostén de la piratería que arrambla con nuestras industrias creativas, récord de reclamaciones en las Asociaciones de Consumidores, invaden todo con su poder omnímodo, y creativos sin cerebro ni principios diseñan este tipo de manifestaciones brutales de promoción hostil. Conociendo el patio, -sé de más de un creativo que empezó como dealer-, la profunda corrupción de todo un sistema revienta obscenamente con ejemplos tan tristes como este. Nada importa. Todo vale.
