En mi denuncia a TVE
por interrumpir las emisiones de películas con autorpromocionales,
hablaba de unas preguntas parlamentarias que hubo de responder el
Presidente de la Corporación, D. Leopoldo
González-Echenique Castellanos de Ubao, que fueron realizadas
por el Diputado Ricardo Sixto Iglesias, basándose en las que planteé a la Comisión Parlamentaria de Control de TVE.
Las
preguntas planteadas fueron:
1-
¿Por
qué TVE no respeta
en toda su extensión los créditos de
las
peliculas y series que emite?
2-
¿Por
qué 'TVE inserta textos y
animaciones
autopromocionales sobre las imágenes de las obras que emite?
3-
¿Tiene conocimiento del uso de
estas
prácticas en otras televisiones de
nuestro
entorno
occidental?
4-
¿Por qué no se utilizan este tipo de
sobre
impresiones en otras
emisiones como por ejemplo de partidos
de fútbol
o
Informativos?
5-
¿qué medidas va a
adoptar
para que se
trate con
más respeto la Integridad artística de
las
obras audiovisuales?
6-
¿Estima que las obras audiovisuales emitidas por TVE tienen valor
pedagógico para que las nuevas generaciones
se eduquen como espectadores?
7-
¿Tienen
estimado el grado de molestia
que ocasiona a los
espectadores ver sobre impresionado en la
emisión de algunos
programas determinados "banners" o
autopromos?
8-
En su caso ¿
cuál
es éste?
9-
De no tenerlo
estimado ¿piensa hacer algún tipo de
encuesta-estudio
para determinarlo?
Las respuestas del Presidente
fueron estas (los errores sintácticos y ortográficos están en el
original):
Es
una práctica habitual en todos los canales, públicos y privados. La
eliminación los créditos se hace
pensando en el espectador, que demanda una emisión continua lo más
atractiva posible. El estudio
del minuto a minuto de la audiencia aconseja que las transiciones
entre programas sean rápidas,
de lo contrario, el espectador muestra su rechazo y
elige
otra oferta.
La
emisión de promociones solapadas
también
es una práctica extendida en todas las cadenas y
por radiodifusores,
públicos y privados,
de numerosos países. Se emplea con el único objetivo de informar
al espectador sobre la oferta de los canales. Es una ayuda visual que
permite al espectador saber
que programa va a dar comienzo, sin tener que estar buscando esta
información por otra vía.
Desde
TVE se opta por una autopromoción solapada muy poco intrusiva,
puesto que ocupa un espacio
muy reducido en la parte inferior de la pantalla y se mantiene menos
de 5 segundos. En concreto,
los formatos de deportes y de información son dos géneros
televisivos que suelen incorporar
a su emisión numerosas rotulaciones, estadísticas, resultados,
titulares y demás grafismos
que podrían ser tapados con las autopromociones solapadas. Por esta
razón, se evitan las impresiones
promocionales en programas que abordan estos dos géneros.
En
definitiva, TVE utiliza esta
práctica
siempre
que
aporte una información añadida al espectador y se
apoya en un mecanismo que se refuerza día a día y que se centra en
cuidar al máximo el minuto de
escaleta de emisión, para no tapar textos relevantes del contenido
con la impresión promocional.
Además, como dato significativo, entran unos 24
millones
de españoles a ver
alguno de
los canales de TVE y las quejas de espectadores en este sentido
no
llegan a dos al mes y
a
veces de la
misma persona.
Por
supuesto, esa “misma persona” me temo que soy yo. Este fue mi
comentario a las respuestas del Presidente de la Corporación, que
adjunté a mi denuncia fallida a la CNMC (copio y pego):
1- RTVE
no responde a todas las preguntas planteadas. De las 9 preguntas se
responde aproximadamente (pero sin enunciarlas) desde la 1 a la 4,
obviando las restantes 5 a 6, y con una leve respuesta genérica a
las 7, 8 y 9 al final.
2- En
el primer párrafo de la respuesta parlamentaria, RTVE responde a la
pregunta 1 que se refiere al por qué del corte de créditos de las
películas, y aduce en su respuesta al “Todos lo hacen” como
excusa para el corte de créditos, con términos mercadotécnicos
impropios de una sociedad pública. El “Todos lo hacen” es una
falacia conocida como “argumento ad populum” bastante burda, y no
responde en realidad a lo planteado: ¿Por qué se hace? Una falacia
NUNCA es una respuesta.
3- En
el segundo párrafo, RTVE responde a las preguntas 2 a 4 que se
refieren a las inserciones de autopromocionales sobre películas,
documentales y series de televisión, de nuevo aduciendo “que otros
lo hacen”, por tanto de nuevo con la falacia “argumento ad
populum”, como única razón de esta conducta. Insisto en que nunca
una falacia sirve de respuesta a una pregunta , y menos aún a una
formulada en el Parlamento de la Nación. Usa sin embargo el
Presidente de RTVE en ese párrafo el término “autopromoción”
por lo que se asume el carácter
publicitario de las inserciones, de
modo que es el propio Presidente del Ente público el que afirma en
un escrito oficial (una respuesta a una pregunta parlamentaria lo es)
algo que incumple flagrantemente el Art. 14 de la Ley
7/2010, de 31 de marzo, General de la Comunicación Audiovisual. El
Presidente además vuelve a incidir en el carácter publicitario de
las inserciones al calificar de “impresión
promocional”
estos mensajes intrusivos en el tercer párrafo y último de la
respuesta parlamentaria.
4-
En el segundo párrafo asimismo, RTVE admite que, efectivamente, no
se colocan autopromocionales sobre las imágenes de retransmisiones
deportivas, tal como el Denunciante indicaba en su denuncia, para
evitar que interrumpan los grafismos de estos eventos, cosa que se
hace sin la menor contemplación sobre largometrajes, documentales y
series de televisión (como se dice en la denuncia, en el caso de los
documentales los autopromocionales llegan a tapar los nombres,
subtítulos y acotaciones en sobreimpresión de las obras sin la
menor contemplación). Es decir, se considera programación
“interrumpible” y por tanto “de segunda clase” la obra
cinematográfica, documental o se serie de televisión, frente a la
retransmisión deportiva que se asume como “no interrumpible”
para el espectador y por tanto de “clase superior”, que no debe
de ser obstaculizada. Claramente esto va en contra de la filosofía
de Servicio Público de RTVE.
5-
En el tercer párrafo, RTVE intenta responder a las preguntas 7, 8 y
9 que consultan sobre si se han hecho estudios demoscópicos
alrededor de la molestia que las sobreimpresiones de promocionales
pudieran causar en el espectador, aduciendo que apenas recibe quejas
al respecto. Esta es la falacia conocida como de Generalización
Apresurada, que es un caso particular de la ya citada “argumento ad
populum”. En realidad RTVE afirma con esta falacia tan poco
elegante que no ha hecho estudio demoscópico alguno, enunciando la
falacia tipo “si nadie se queja es que no hay problema”
(“argumento ad populum”), y negando por tanto la mayor. De nuevo
una falacia no puede aceptarse como repuesta, que debería de haber
sido: “No, no hemos realizado estudio alguno ni lo pretendemos”,
que es lo que se lee entre líneas. Resulta una respuesta escasamente
profesional.
La
respuesta parlamentaria, como conclusión, en opinión del
Denunciante es una admisión de culpa al aceptar como publicidad los
autopromocionales, sólo responde con falacias, y muestra el nulo
respeto que merece al Ente RTVE la Institución que formula la
pregunta, que les recuerdo es el Parlamento de la Nación.
Como ya he comentado, mi denuncia
ante la CNMC quedó en agua de borrajas. TVE sigue interrumpiendo las
películas que emite impunemente.
El logo de La 2 de TVE lo encontré en Wikimedia Commons.